Las conversaciones de dura Dura y ebria Estás rocas no estimulan No avivan ni estimulan Que hable Que hablen Escuchar es mi rol Las conversaciones de ebria Ebria y dura Siguen siguen Sin camino Parecen no tener final Estaré mejor en mi cama? Tengo realmente una cama?
Querido hace tiempo me es insuficiente La mirada indiferente Cuando tus pupila chocan conmigo Querido hace tiempo Que estuve esperando abrazos y cariños Ahora que no espero Puedo nadar sin hundirme Por los rincones de nuestra casa. Llegas, te sientas a llorar, intento subirte el ánimo. Llegas, me ves extraña, me preguntas que me pasa, digo nada, vuelves a lo tuyo. Hace un tiempo que decidí no seguir siendo La esposa desesperada por el cariño no correspondido de su esposo En este arco que jugamos a la monogamia, a la casita y a los hijos gatos Me hace tener un rol fijo, estar de día limpiando la casa, darle de comer a los animales, lavar la ropa, la loza, trabajar algunos días. Este rol de esposa me tiene interpretando quizás hasta cuándo. Ya no seré esa estúpida desesperada que intenta llamar la atención para recibir un poco de cariño. Dame un abrazo? Me dices. Dámelo tu, si quieres uno ve y tómalo. Ya no estaré jugando a la callada Ni menos a la estupida. Puedo vivir sin tu cariño
Alguien hace no tanto Me trataba como Homero a Morticia Elegante y enamorado Obsesionado con mi belleza No dejaba de repetirme Cara mía eres hermosa Mientras yo intentaba devolverle el gesto Hablando de oscurantismo un algo agitada.
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